Una escuela de vida

Hola amigos:

Con este blog, pretendemos compartir nuestras experiencias, las de un pequeño grupo de personas que decidimos lanzarnos al vacío a la búsqueda de otro modo de vida más armónico y de plenitud interior, siguiendo el camino del corazón.
Así hemos creado Una escuela de vida en la finca el camino en la provincia de Cáceres
Nuestro trabajo se basa fundamentalmente en la profundización en el mundo emocional, la comprensión del mismo, la desprogramación mental de las viejas ideas limitantes, el descubrimiento de los autoengaños y la recuperación de nuestra creatividad dormida. Se trata de recuperar la absoluta responsabilidad de nuestra vida desde el ejercicio de la Verdad.
"Y conoceréis la verdad y la verdad os hará libres"
Podéis conocernos a todos pinchando en la página de Bienvenida.
No dejéis de visitar el resto de páginas "cómo llegar", "estancias" etc.. Contacto: fincaelcamino@gmail.com

En la parte superior tienes un reproductor de música SCM music player que puedes encender o apagar a voluntad y elegir entre 15 temas, 7 de ellos compuestos por Carlos. Pinchando aquí, puedes bajarte un archivo con los 7 temas
sigue la flecha, este texto aparece en cada página

Todo un ejemplo

   
      Hoy queremos contaros algo que nos ha conmovido. Quizás para algunos resulte hasta banal o quizás simplemente otros no le den importancia, pero a nosotros nos ha emocionado.

      Como ya mencionamos en otro apartado de esta página, queremos convertir la alberca de riego que hay en la finca, en piscina. Nos gustaría tenerla lista para este verano.

       El motivo es que si queremos que venga gente en verano, nos parece importante poder ofrecerles una piscina, aunque los baños en los pantanos cercanos son geniales, a veces no apetece desplazarse según el trabajo que se esté haciendo. Además la piscina como lugar de meditación y sobre todo de noche es una maravilla.

       La cuestión es que en este momento no tenemos dinero para construirla y aquí es donde viene lo emotivo de esta historia.

       En la entrada "Reflexiones de estos 14 meses" Ya nombramos a José Ramón Martín, quien nos ha hecho las obras. Hoy queremos hablar un poco más de nuestra relación con él, puesto que para nosotros ha sido y es como el ángel de la guarda desde que llegamos a Moraleja.

       Supimos de J. Ramón, porque el dueño anterior de la finca nos habló muy bien de él y nos dio su teléfono. Desde el principio se estableció entre nosotros una relación muy cercana y una confianza absoluta.
Nos hizo las obras como si fuesen para sí mismo, ahorró cuanto pudo en la selección de materiales manteniendo la calidad, consiguiendo ofertas etc. y todo en nuestro beneficio. No nos pidió ningún anticipo para comenzar la obra y solo cuando ya estaba casi acabada, nos dijo que necesitaba algún fondo.

       Cuando nos instalamos aquí, nos fue presentando a cuantos gremios necesitamos, almacenes, tiendas y cualquier cosa que nos hiciese falta. Debido al buen nombre que él tiene en todos los sitios por aquí, al ser presentados por él nosotros hemos recibido el mismo trato de confianza. Todo esto es algo que en el mundo en que vivimos no tiene precio.

       Cuando le pedimos presupuesto para hacer la piscina, nos dio un precio en el que no obtiene beneficio.  Debido a la confianza que tenemos, está a corriente de nuestra situación económica y cuando nos trajo el presupuesto, estas fueron sus palabras.

        "Aquí necesitáis una piscina, no os preocupéis ahora por el dinero, ya llegará. En este momento tampoco yo estoy fuerte como para asumir el gasto de la obra, porque me deben un par de cosas, pero a final de mes espero que por lo menos una me hayan pagado y en el momento que la cobre hacemos la piscina"

          Hemos querido compartir esta experiencia como ejemplo , porque creemos firmemente que si hemos de salir de forma pacífica del agujero en el que el mundo se halla metido, el único modo es la colaboración de unos con otros, el compartir, hacernos de banco unos a otros sin cobrar intereses, financiando aquellas cosas que creemos van a ser de provecho para los demás etc.

           J. Ramón no es alguien que hable de espiritualidad, pero evidentemente actúa desde el corazón.
           Hay en el mundo mucha buena gente de la que no habla la tele, pero está ahí, justo al lado.

           Muchas gracias querido amigo José Ramón. Un fuerte abrazo de toda la familia de la finca el camino